Hay muchas cosas que no me gustan: madrugar por la mañana, no conseguir dormir, tener que irme de un sitio en el que estoy a gusto, que me piquen los ojos cuando llevo mucho tiempo leyendo, que el ordenador vaya lento, que mis padres me obligue a comer lo que no me gusta. Tampoco me gusta discutir, que la gente no me de la razón cuando sé que la tengo y que no me tomen en cuenta. Odio a la gente que se cree mejor que los demás y tener que contenerme para no decir lo que pienso. No me gusta aguantarme las ganas de llorar, tampoco tener vergüenza ni ponerme colorada cuando la tengo o paso claro. Que el verano se acabe, empezar las clases, y sobre todo los exámenes. No me gusta la gente falsa, las amigas que te mienten, que la gente que quiero se vaya. La tristeza tampoco me gusta, que el tiempo pase rápido, no tener todavía 16 años, que la gente hable de cosas tristes. Las migas de pan que se meten en las mangas y pican. Los insectos los odio. No me gusta que se rían de mi, ni que los finales de las historias no queden claros, las películas de miedo, aburrirme, que la gente no me hable. Que el pelo me quede mal y no saber que ponerme, los mentirosos. Hay demasiadas cosas que no me gustan, y me gustaría seguir escribiendo pero... otra cosa que no me gusta es escribir al final de las páginas.
(Es una redacción que tenía que hacer para clase de Lengua, escribí un folio entero y me gustó como me quedo... espero que a vosotros también)